domingo, 21 de octubre de 2018

MEDIO MARATÓN DE TALAVERA

Dice el refrán: "A caballo regalado no le mires el diente". Y es que sería de mal gusto criticar una carrera en la que me han regalado el dorsal.

Aún así el fallo de ayer en la media de Talavera merece ser mencionado porque a pesar de no darle mucho valor a que una carrera esté mal medida por 100 metros arriba o abajo me parece imperdonable que una prueba que cumple su XXXII edición yerre en la medición por 1,5km de menos. El fallo, observando el plano del recorrido publicado, no está en la planificación sino que el día de la prueba no nos hicieron girar por una calle de ida y vuelta que supongo equivaldría a ese kilómetro y medio de menos que midió.

Al ser un regalo no le di importancia sin embargo entiendo que gente que había pagado y que iba buscando un tiempo bueno para acreditar para otras carreras se queden enojados.

El recorrido es tal y como se vende plano sin ningún tipo de cuestas. Aunque bien es cierto que ayer nos azotó el aire de lo lindo en determinados tramos. También es justo decir que al ser muchas avenidas de ida y vuelta se compensaba, hacia un lado te daba en la cara y hacia el otro lo llevabas a favor.

Comenzamos saliendo desde el recinto ferial en dirección al hospital para coger una larga carretera que nos subirá por el puente más destacable de Talavera, se ve desde cualquier punto, y cruzar por encima del Tajo. El viento no deja de molestar hasta que hacemos el giro en el km 5 y volvemos hacia Talavera.

El cuerpo aguanta perfectamente e incluso pide ir más rápido pero yo aquí había venido a correr a ritmos de 5:40 en mi preparación para Valencia y estoy en ritmos de 5:20. Así que decido no forzar. Volvemos a pasar junto al recinto ferial y enfilamos el camino hacia el centro de la ciudad. Y es en este tramo pasado el km 11 cuando ha ocurrido el error ( o eso creo porque la organización no ha dicho nada). Además el viento hace que todos lo carteles de los kilómetros estén en el suelo y no se vean.

Yo no fui consciente de que el recorrido estaba mal medido hasta el avituallamiento del km 15. Cuando pasé por allí y vi el cartel comprobé por mi reloj que estaba en el km 14,5.

A partir del km 16 sufro un bajón que me hace volver a la realidad y saber que mis ritmos en un maratón están muy alejados de correr a ritmos de 5:15. Así que toca sufrir, pero esto también es necesario hacerlo para preparar un maratón, y tras cruzar en un par de ocasiones por sendas pasarelas sobre el río Tajo enfilamos el último tramo en el que veo tumbado en el suelo el cartel del km 20. Mi reloj dice que llevamos 18,6. Así que está claro que esta media no va a medir lo correcto.

Volvemos a entrar en la calle que lleva al recinto ferial y me encuentro con mi madre que se ha acercado a verme desde el pueblo. Una excusa como cualquier otra para tomar el aperitivo. Al final 19,7 km en 1:45:26. Una lástima que no estuviera bien medida para tener un tiempo decente en media maratón este año. Desafortunadamente no ha sido una media que me haya gustado para repetir así que no creo que vuelva.