SERTRI MADRID 2012

Hacía un par de años que me rondaba por la cabeza el tema de hacer un triatlón, pero con los pequeñajos nunca tenía tiempo.

Así que decidí que en el 2012 tenía que conseguir hacer alguno. Hace 5 meses (en Junio) fueron las pruebas de la copa del mundo de triatlón en Madrid, y para ya que me fui. Fue ver a todos esos máquinas nadar, pedalear y correr y saber que esa prueba la tenía que probar.

Llegué a casa y busqué una prueba, y encontré el Sertri de Madrid el 7 d octubre, así tenía tiempo para entrenar en vacaciones la carrera y la natación y el mes de septiembre la bici.

Llegué el día 7 de octubre a la salida, no estaba nervioso, pero sí que estaba deseando tirarme al agua. Iba con Paloma, que me iba a hacer de porteadora. Llegué recogí todo lo que me hacía falta y preparé el material. Como la salida era por tandas y me faltaba una hora para salir nos fuimos a ver a las primera tandas, ¡y vaya sorpresa!, me pareció que los triatletas tenían un ritmo muy flojo en natación, lo cual me animó bastante.

Llegó la hora, todos a la salida, el bañito previo sirvió para quitar los nervios y para comprobar que aunque el agua estaba fría se podía soportar. AL AGUA!!!!!!! me tiro de los últimos, enseguida encuentro un hueco y empiezo a nadar, como a los 250 mtrs me encuentro con un montón de gorros amarillos que han salido 2 minutos antes que yo. "estupendo esto va fenómeno". Sigo nadando y noto que alguien me agarra del pie y que pierdo el chip, me doy la vuelta y lo cojo, pero al cabo de un minuto me doy cuenta que en la mano solo llevo el velcro, el chip no esta. Lo tiro todo y a nadar. Consigo coger un buen ritmo e incluso al final disfruto viendo a la gente sentada en la colina tirando fotos. Salgo, miro el reloj y son 15:17, me gusta como empieza esto.

Voy camino de la transición y allí veo a Paloma y a mi tío Jose, se sorprenden de que ya aparezca por allí,jaja...... llego a la transición y todo bien, me monto en la bici y pienso:" Llega lo duro pero solo son 23 km, vamos!!!!". La primera vuelta comienza con una subidita está llena de gente y eso anima bastante ( por aquí ya aparecen mi hermano y Sandra y eso se convierte en un box familiar gritón,jaja). La primera vuelta sufro un poco con los cambios, quiero forzar demasiado, la segunda voy más suelto y de hecho desde el box me gritan q mejoro. La tercera bajo un poco el ritmo sabiendo que luego quedan los 5 km de carrera, cojo un ritmo de subida para Garabitas y con él llego hasta el final, la bajada como siempre a tumba abierta y luego a rodar lo mejor que sé. Total 1 hora.

La T2 se me atraganta porque las bicis de mi lado están mal colocadas y tengo que moverlas. Salgo un poco enfadado por haber perdido tanto tiempo, pero enseguida noto los cuadriceps como menhires......arghhh........ de repente hay alguien e la organización dando agua (mil gracias le dí, xq iba deshidratado). Empecé a ritmo tranquilo para que se soltaran las piernas. El primer kilómetro fue tranquilo y a partir de ahí sentí que podía correr. Cogí un ritmo tranquilo 5:20, ya sabía que iba a terminar y sobre todo que no iba a hacer el ridículo incluso haciendo un tiempo mejor del que esperaba.

La carrera fueron 27:02 y acabé feliz con un tiempo de 1:46:50.






Cuando terminas no tienes claro si lo has disfrutado bastante, pero lo que sí sabia era que era el primero de bastantes. Ahora toca pensar en un olímpico ¿cuál? no lo sé depende del tiempo que tenga para entrenar.

INICIO DE LA SUPERACIÓN

Va pasando el tiempo y se van acumulando carreras en mi cabeza. La mayoría con una historia detrás.

Hace ya 7 años que corrí mi primera carrera ( ¡7años! ¡ que bárbaro!). Por aquellos tiempos había pensado en varias ocasiones plantearme correr alguna carrera, me lo planteaba más por admiración hacia toda esa gente que había visto durante años correr que por tener algún tipo de superación.

Un día, a falta de unos 20 días para la carrera, hablando con mis primos me dijeron que se habían apuntado a correr la carrera de Canillejas. Dios tantos años viendo a mi tío Jose correr esa carrera y mis primos se animaban a acompañarle, y yo sin embargo sin hacer nada. Me tiré la manta a la cabeza y me pase por una tienda para apuntarme también.

No había corrido en años, mi forma física era lamentable y sobre todo estaba acojonado. Fue una imprudencia total, pero ya estaba hecho ahora tocaba superarse, y como muchísima gente que se empieza a aficionar,  mi meta era conseguir el trofeo que daban (me hacía ilusión tenerlo en casa).

Llegó el día de la carrera y allí estaba en la salida, todo el mundo con pinta de corredor menos un servidor. Como no había entrenado ni sabía lo que iba a hacer decidí que lo mejor era seguir a alguien veterano, con más de un maratón y cientos de carreras de 10km. Ese era mi tío, así que salí a su ritmo (que error).

En un principio me sorprendió aguantarle sin problemas pero a partir del km 3 empecé a sentir lo que es correr sin entrenar. A la altura del km 4,5 le dije que se fuera y ahí empezó mi calvario, fueron pasando los kilómetros medio corriendo y medio andando, mirando hacia atrás por si me pillaba la ambulancia o coche escoba y con la única idea de conseguir el trofeo. 1h:04 después llegué a la meta revantado pero sintiendo una extraña sensación de felicidad, tras 6 km eterno y angustiosos lo había conseguido. Sabía que esa no sería mi última carrera.

Tardé unos años en entrenar en serio pero ahora me encanta probar cosas nuevas y buscar superar los límites de mi cuerpo, de momento no encuentro tope y por eso mis retos se amplían y el cuerpo responde sin dar problemas ni dolores. Ya he realizado carreras de 10 km, medio maratones, duatlones, triatlones, combi-dos o travesías de natación y en todas he acabado sintiendome bien.

El secreto no dejar de entrenar.

Espero poder escribir en este blog hasta donde llegan mis límites.