VI LEGUA CUBAS DE LA SAGRA

preparados para correr

A pesar del catarro que arrastro desde hace 10 días, y que mi ritmo de entrenamientos ha bajado muchísimo, esta mañana hemos madrugado para disputar por segundo año la legua de cubas de la sagra.

Reconozco que participo en esta carrera por los niños más que por mí. Desde la organización ponen mucho cariño en las pruebas infantiles y además traen un montón de castillos hinchables que hacen que los pequeñajos estén entretenidos mientras corremos los adultos.

Mi carrera ha sido igual que la del año pasado. Mi cabeza sabía que no estaba para igualar el tiempo de hace un año pero mi corazón quería intentar mejorarlo.


A las 10 en punto dan la salida y a diferencia de hace 1 año no salgo atrás, de hecho salgo bastante adelante. Los primeros 800 metros son cuesta abajo y me tiro en un ritmo que sé que no podré aguantar. Vamos todos igual, es lo que tienen las carreras cortas. Después de los 800 metros comienza una subida de unos 500 metros, es la única del recorrido.

Km 1 en 4:07. La cuesta la subo a un ritmo más tranquilo, enseguida volvemos a las calles de Cubas y vamos callejeando. Voy corriendo metido en un grupo, intento no perder a ninguno y que no me alcancen por detrás. Al final hemos llegado todos los de este grupo más o menos  en el mismo tiempo.

Km 2 en 4:39. A partir del km 2,5 ya veo que no voy bien pero sigo sufriendo que solo quedan 3 km. Se sube una calle,sin mucha pendiente, cerca del km 3. A mí ya se me hace larga pero me anima que nadie me pase. Km 3 4:36. Tras pasar el km 3 ya sé que solo queda mantener porque pillaré varias calles en bajada. En la primera bajada cojo a algunos del grupo que se habían escapado en la calle anterior.

Adelantando en la recta final

Paso el km 4 en 4:52, es la primera vez que me fijo en el cronómetro. Sé que puedo andar cerca del tiempo del año pasado. Enfilo la última calle abriéndome para recuperar algún puesto, por lo menos intentar quedar entre los 80 primeros como el año pasado.

En la recta final están Paloma y los niños, me animan pero como voy intentando adelantar a dos personas y no esperaba que estuvieran no les veo.

Al final 23:41 y puesto 81 de la general, uno más que el año pasado. Y el 17 de mi categoría, cosa que el año que viene no mejoraré ya que toca cambiar a Veterano. Para el trancazo que llevaba estoy muy contento solo he tardado 8 segundos más.


Y después de mis batallitas andarinas llegan las de los dos enanos de la casa.




Estuvieron haciendo un gran calentamiento a base de saltar en los castillos y correr de uno a otro.

Estamos listos

Tras tener todos los músculos preparados se pusieron la camiseta de la carrera y nos fuimos a la salida.

La primera Candela. Esta vez no ha llorado lo cual es un logro. Pero el del silbato toco a su lado y le miro con cara de pocos amigos. Fueron los 100 metros más tranquilos de la historia. Ella y dos niñas más decidieron tomárselo con calma y en lugar de correr pasearon. Eso sí consiguieron los ánimos y vítores de todo el pueblo, y eso a mi Candela le gusta. Allí iba ella con su mano a la espalda mirando a todo el mundo animarla y andando. Llegó en un último puesto muy meritorio para su edad, eso sí la bolsa de chuches se la comió como si tuviera 5 años, que había hecho un esfuerzo muy grande.

Estos son nuestros dorsales

Después llego el turno de Jorge. Recordaba que el año pasado había corrido tras un pollo y pregunto si este año iban a poner un pavo, jaja. Finalmente no hubo ni pollo ni pavo, pero en cuanto dieron la salida hecho a correr sin mirar atrás llegando antes de lo que esperaba. Y claro como no iba a ser él menos también cogió su bolsa de chuches y la devoró.

En fin que pasamos otro año agradable en Cubas corriendo esta Legua.

los 3 con las mismas camisetas. Ya somos club.