DOBLE LEGUA DE COSLADA

Gentileza de la http://www.revistarunonline.com

¿Por qué todos los corredores salimos sonriendo en las fotos?

¿Os habéis fijado en las sonrisas de las mayorías de las fotos de gente corriendo? Fijaos en la foto de arriba, parecen 3 atletas coordinados. Un pie haciendo el apoyo sobre la puntera, el otro en el aire para volar lejos, deditos arriba y sonrisa en la cara.

Parece fácil y hasta divertido, da la sensación que cualquiera puede hacerlo. Pero realmente para que esa foto se produzca deben pasar varias cosas hasta ese momento.

La primera trasladarme hasta Coslada para correr por segunda vez esta prueba, aunque en esta ocasión la doble legua (11,5km). Llegué al polideportivo recogida del dorsal rápido, cambio de ropa en los vestuarios del polideportivo sin pasar nada de frío y de ahí a dejar la bolsa en el ropero sin problemas. Organización exquisita, de Matrícula de Honor para esta prueba y todo por un precio muy económico.

Una vez preparado comienza la espera por tercera carrera consecutiva de los hermanos Sagüillo. Ellos son muy risueños y simpáticos pero suelen tener el defecto de ser impuntuales en extremo. Como siempre aparecen con el tiempo justo, comienzan a cambiarse y David desaparece. 

Menos de 10 minutos para que comience la salida (a 500 metros) y aún en el polideportivo, Javi y yo comenzamos a comprender la extraña abducción de David. Tenemos claro que ha decidido leer la prensa con tranquilidad en el baño del vestuario antes de salir. Y es que no se sonríe igual si no sales a correr con los deberes hecho.

Estamos super nerviosos esperando a David y viendo que no llegamos a la salida

Entre risas y metáforas del momento David, aparece gente de la organización que nos avisa que faltan menos de 5 minutos para la salida. Javi y yo conseguimos sacar a David del vestuario e irnos corriendo hacia la salida. 30 segundos nos sobraron, el tiempo justo para la foto y salir a correr por las calles de Coslada.

Que sobran 30 seg pues foto.

La salida es cuesta abajo y enseguida empiezo a sentir mis molestias en el pie y rodilla, no me hace gracia pero menos mal que hoy son solo 11 km. Tras 500 metros giramos y enfilamos una ligera subida junto al polideportivo que poco a poco va ganando pendiente para terminar pasado el km 2,5 en una zona de chalets. Aquí no sonríe ni dios, no hay nadie para tirar una foto y es que hasta en esto piensan los organizadores, no es bonito salir con cara de sapo, con los ojos inyectados en sangre del esfuerzo.

 Como me había distanciado un poco de los hermanísimos freno y les espero. Ya no hay dolores así que a disfrutar todos juntos

Tras una larga bajada David se recupera y consigue expulsar todos los mocos del catarro que arrastra de esta semana, es lo que tienen los enanos. Javi sigue corriendo sin esfuerzo, para él esto es como comer pipas, una cosa sencilla.

Pasamos las vías del tren, bajamos hacia el centro del Coslada y a la altura del km 4 viene otra subida que se hace larga casi hasta el km 5.

Tras esto llega el momento charloteo, que si yo tengo un maratón, pues yo 3, yo ninguno y estoy acojonado. Incluso recordamos a nuestras santas mujeres, que si a mí me gusta que me acompañe a las carreras, que menos mal que nos dejan salir a correr, que si yo a la mía le voy a pedir que me acompañe a tres puntos del maratón porque la necesito.

Y así sin prestar atención al recorrido olvidamos todo lo que nos rodea y disfrutamos del dulce momento que da correr con amigos entre risas y vaciles.

Y en esas andamos cuando de repente a la altura del km 7,5 aparece un cartel que dice sonríe o saluda. Nosotros como pensamos que somos profesionales cuadramos el paso y nos arriesgamos a hacer hasta las dos cosas a la vez. Y esa es la foto que da inicio a este blog.

Desde aquí decidimos posar y enseñar nuestros estudiados movimientos a todos los fotógrafos y compañeros de carrera. Tras pasar la última subida del puente del km 8 y rodear el polígono animándonos a cantar en el km 9 con el pedazo equipo de música que han puesto a todo volumen, nos preparamos para el momento más duro, el de separarnos.

Cerca del km 10 la carrera se separa, por un lado los valientes de la media, por el otro los aguerridos de la doble legua. 

Si esto no es felicidad fraternal será postureo

Correr solo ya no es motivo de sonrisa, así que en la soledad de ese 1,5 km decido borrar mi cara risueña para sacar un poquito de jugo a mis piernas. Esa distancia cayó a una media de 4:38, años hace que no corro a esos ritmos aunque si tengo que seguir 400 metros más me tienen que cortar el pie. Al final terminé muy contento en 1:02:20.

Si poso no sale igual la sonrisa.

David y Javi continuaron con su carrera de 21 km. Siguieron sonriendo y disfrutando, así lo demuestran las fotos. Pero habían perdido al escudero al que echar todas las culpas de sus cambios de ritmo. Aunque no se les dio mal porque llegaron en 1:58:12 manteniendo el pacto de principio de carrera.

21 km y llegar muertos de risa, esto es fake.

Si algo he aprendido en estas 3 carreras con ellos es que correr con amigos es divertido aunque haga años que no los ves, y que estos dos le han cogido el vicio a esto que llaman running y que ahora se puede correr con ellos de cháchara y sonriendo por las distintas calles de España. Como siempre un placer compartir kilómetros con vosotros.

Disfrutan igual comiendo que corriendo. Puede que incluso más con lo primero.

RAZONES PARA CORRER LA MEDIA MARATÓN O DOBLE LEGUA EN COSLADA

1º. Porque correr solo está bien y muchas veces es necesario, pero cuando corres por tercera carrera consecutiva con David y Javi es sinónimo de disfrutar. Y es que correr con amigos es un placer indescriptible.

2º Porque la carrera está organizada por un club de atletismo que piensa únicamente en el disfrute del corredor más que en su beneficio. Por eso la inscripción empieza costando 6€. Al finalizar te dan una bolsa muy generosa y sobre todo lo que más me gusta un desayuno de pan con aceite y zumo que te levantan las ganas de volver a correr. Además tienen grifo de cerveza aunque este año servía cerveza con limón, pero no nos vamos a quejar que somos atletas.

Si no te mola este desayuno es que no eres español.

3º Porque los baños no son químicos sino los vestuarios del polideportivo. Esto hace que si tienes un apretón los utilices e incluso los disfrutes pasando un rato en ellos, ¿verdad David?, aunque hagas llegar a tus compañeros de carrera a 30 segundos de que den la salida.

4º Porque el recorrido no es bonito, ni sencillo. Pero tampoco es monótono visualmente hablando y las cuestas igual que se suben se bajan y al final hacen que disfrutes. Siempre querrás volver.